º El bicampeón centroamericano en triatlón se compromete a saltar a las aguas del Río Sena durante su competencia en París, en busca de la ansiada presea
Aram Peñaflor disfruta el proceso previo a lo que será su debut en unos Juegos Olímpicos, tras ser designado por la Federación Mexicana de Triatlón como dueño de la plaza olímpica varonil con la que contaba nuestro país en este deporte.
Nacido en Toluca hace 25 años, pero representante de Jalisco desde muy joven, el bicampeón centroamericano en San Salvador y medallista de plata en la Copa del Mundo en Chengdu 2023, reconoce que el pase olímpico, lejos de relejarlo por el hecho de haber cristalizado un sueño, lo compromete aún más a conseguir otro de sus objetivos en su carrera deportiva.
“No se trata solo de clasificar a Juegos Olímpicos: es ir a competir. Mi gran sueño es llegar de la mejor manera y hacer historia para mi país. Yo sueño con una medalla olímpica y voy a hacer todo lo posible para hacerlo realidad”, mencionó el pupilo del entrenador Luis Miguel Chávez, con quien entrena en el Polideportivo Metropolitano.
Aram, quien desde muy niño buscó integrarse a alguna disciplina deportiva, protagonizó muy pronto una historia de frustración al quedar relegado de las Fuerzas Básicas del equipo Toluca de futbol, “desafortunadamente no me quedé. La vida me dijo: no es en este deporte, pero quizá llegue otra cosa. Y así descubrí el triatlón. Llegué a nadar a una alberca y me invitaron, y como yo tenía muchas ganas de sobresalir en algún deporte, fuera cual fuera, acepté porque siempre se me dio correr. Al paso de los años me vine a vivir a Guadalajara”.
Aunque reconoce que pudo haber alcanzado el éxito desde muy joven, temas de indisciplina evitaron que pudiera explotar ese potencial. “Pero gracias a esas pequeñas lecciones, fracasos o derrotas, me convertí en lo que soy ahora, pero con una meta más clara y con más madurez. Ahora sé a lo que voy y sé a lo que me estoy enfrentando.
“La madurez viene de las lecciones que te da la vida y este deporte siempre me ha dado esas ganas de crecer más. Llegar a París representó todo un proceso, y voy a seguir dando mi máximo esfuerzo para llegar a Juegos Olímpicos con esa confianza y buscando que el resultado sea igual o mejor que el camino que me llevó ahí”.
Será el martes 30 de julio cuando Aram nade en las aguas del mítico Río Sena como arranque de su participación correspondiente al triatlón varonil, mismo que culminará sobre el Pont Alexandre III, buscando alcanzar el sueño que representa la medalla olímpica.
